¿Qué es y por qué puede funcionar la terapia a distancia?
La misofonía es ese fenómeno en el que ciertos sonidos cotidianos —como alguien masticando, respirando con fuerza, tecleando o haciendo ruido con los cubiertos— desencadenan una reacción emocional o fisiológica intensa e inesperada. En algunos casos, genera irritabilidad, ansiedad, deseo urgente de huir o bloqueo funcional.
Como explicamos en nuestro artículo Cómo saber si tienes misofonía, estos síntomas pueden aparecer incluso aunque el volumen del sonido no sea elevado, ya que se trata más de una reacción del sistema nervioso que del oído en sí.
La buena noticia es que la terapia psicológica online ofrece una vía muy válida para abordar la misofonía, especialmente porque:
- Permite intervenir en el entorno real donde aparece el problema (hogar, convivencia, trabajo).
- Facilita la continuidad y la constancia que suelen requerir los tratamientos de habituación o exposición.
- Aumenta la accesibilidad para quienes tienen dificultades para desplazarse o evitan salir por los desencadenantes sonoros.
- Permite adaptar el entorno terapéutico: el paciente puede trabajar con los sonidos reales que le afectan, acompañado por su terapeuta online.
¿Cómo es un tratamiento online de misofonía?
Aunque cada caso es único, un protocolo terapéutico online suele seguir etapas similares a las de una intervención presencial, con algunas ventajas añadidas del formato digital.
1. Evaluación inicial
Se realiza una entrevista clínica para conocer los sonidos desencadenantes, el contexto, el grado de malestar y su impacto en la vida diaria. También se pueden usar escalas de autoevaluación y establecer objetivos concretos, como reducir la intensidad de las reacciones o aumentar la tolerancia sonora.
2. Psicoeducación
Comprender qué es la misofonía ayuda a reducir la angustia y la autocrítica. En el artículo Misofonía: comprender y abordar la sensibilidad auditiva extrema, explicamos cómo esta condición implica una hiperactivación del sistema límbico y una conexión anómala entre las áreas auditivas y emocionales del cerebro.
Durante la terapia, se ofrece información sobre cómo los sonidos pueden activar la respuesta de amenaza y cómo el entrenamiento en regulación emocional puede reducir esa sensibilidad.
3. Terapia cognitivo-conductual (TCC) online
Este enfoque busca identificar los pensamientos automáticos asociados a los sonidos (“no lo soporto”, “va a volver a hacerlo”, “no puedo estar aquí”) y reemplazarlos por otros más adaptativos.
También se incluyen técnicas de relajación y exposición gradual: el terapeuta puede guiar al paciente online mientras este reproduce sonidos controlados, aprendiendo a observar y tolerar las reacciones sin evitación. Esto permite que el cerebro vaya desensibilizándose progresivamente.
En algunos casos, se recomienda el uso de sonidos neutros o “ruido blanco” para reducir el contraste entre los estímulos molestos y el silencio.
4. Terapia de aceptación y compromiso (ACT)
Las terapias de tercera generación, como la ACT, enseñan a dejar de luchar contra las sensaciones desagradables y a aceptarlas sin identificarse con ellas. El objetivo es ampliar la flexibilidad psicológica: poder actuar de acuerdo con los propios valores incluso en presencia del malestar.
En formato online, el terapeuta puede guiar ejercicios de atención plena, observación sin juicio, y reflexión sobre los valores personales. Esta combinación es especialmente útil cuando la misofonía genera ansiedad anticipatoria o aislamiento social.
5. Trabajo en el entorno y prevención de recaídas
Finalmente, se diseña un plan personalizado para afrontar los sonidos problemáticos en el entorno cotidiano: comidas familiares, reuniones laborales, espacios públicos…
También se abordan estrategias de comunicación asertiva, de modo que el paciente pueda expresar sus necesidades sin conflicto. En este punto, resultan muy útiles los enfoques de aprendizaje de límites y autocuidado emocional.
Ventajas y desafíos del formato online
Ventajas
- Mayor comodidad y privacidad al realizar la terapia desde casa.
- El tratamiento se adapta al entorno real donde aparecen los sonidos.
- Flexibilidad de horarios y continuidad en el proceso terapéutico.
- Posibilidad de integrar prácticas de mindfulness en casa, entre sesiones.
Desafíos
- Requiere un espacio tranquilo y estable durante las sesiones.
- Puede ser necesario ajustar la intensidad de la exposición a sonidos.
- Algunas personas necesitan apoyo adicional si la ansiedad es muy elevada al inicio.
¿Cuándo buscar tratamiento online para la misofonía?
Deberías considerar pedir ayuda cuando los sonidos te generan reacciones intensas y recurrentes, o cuando tu vida diaria se ve limitada por la evitación. También si notas que te aíslas socialmente, o si tus relaciones se deterioran por la incomprensión del entorno.
La terapia online permite trabajar todos estos aspectos de manera efectiva, ofreciendo herramientas para gestionar la sensibilidad sonora, reducir la ansiedad asociada y mejorar la convivencia.
Consejos prácticos durante la terapia online
- Elige un lugar tranquilo y utiliza auriculares para una mejor concentración.
- Lleva un registro de los sonidos que te resultan más molestos y de tus reacciones emocionales.
- Practica los ejercicios de respiración y exposición recomendados entre sesiones.
- Informa a tu terapeuta de cualquier cambio o avance significativo.
- Reconoce tus progresos, aunque sean pequeños: tolerar unos segundos más ya es un paso importante.
Conclusión
La misofonía no tiene por qué condicionar tu vida. Existen tratamientos eficaces, y la terapia psicológica online es una opción segura, cómoda y efectiva para aprender a convivir con los sonidos sin que dominen tu bienestar emocional.
En Mentes Abiertas Psicología ofrecemos acompañamiento especializado para que puedas recuperar la calma y reconectar con tu entorno desde la comprensión, la aceptación y el equilibrio.
Si quieres dar el primer paso, puedes leer más sobre este tema en:
